viernes, 11 de noviembre de 2011

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Haces aparecer el fuego de un solo "click", prendes el cigarro y le das la primera calada, larga y profunda, lo apartas de los labios dejando una pequeña mancha de carmin en su borde. Lo observas, y recuerdas aquellas noches salvajes, las locuras, los sabados sin fin, las tardes entre miles de estos mismos cigarrillos con tus amigas y unos cuantos cafés, las chaquetas de cuero, los labios rojos, las ganas de comeros el mundo en una tarde. Todo era tan perfecto que ahora te da hasta miedo, ¿como podiais ser tan ingenuas? Tantas cosas han cambiado que ni tu marca de tabaco sigue siendo la misma, ni las sonrisas tan sinceras. Que las cazadoras de cuero son las mismas que antaño pero ahora llevan el adjetivo desgastadas pegado.
Cuando creces te das cuenta de todas esas tonterias que cometiste, las gilipolleces, esas que ahora no harias ni por haber estado con esa persona a la que tanto "amaste" durante aquellos años. Algunos recuerdos, completamente imborrables, te hacen ver que no fuiste totalmente cuerda ni siquiera responsable. Y ya he perdido el hilo de lo que os estaba diciendo, pero vamos que la conclusion de todo esto era que aun asi mirando atras y mirando al presente las amigas sigen siendo iguales, unas se han oxidado, han dejado de ser como antes, pero las de siempre, esas aun siguen ahi, y creedme, seguiran.


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